Daleph ofrece el acompañamiento para elaborar un plan de integridad para organizaciones públicas. Desplegar una estrategia de integridad pública es un ejercicio complejo, y Daleph puede contribuir a que las organizaciones configuren un plan de integridad que sitúe los pilares convenientes para la implantación y consolidación de una política de integridad pública.
El impulso de una política de integridad es un desafío que constituye un elemento más en la gestión pública, orientada a la mejora continuada del conjunto de la organización, y que va más allá de la persecución del fraude.
Daleph acompaña a las administraciones públicas en la definición, configuración y adaptación de las diferentes herramientas e instrumentos que constituyen un sistema de integridad, y que deben plasmarse en un plan de integridad que guíe las actuaciones de la organización. Este sistema de integridad se vehicula a través de tres capas diferenciadas:
Un nivel estratégico que comporta una visión a largo plazo e impregna la toma de decisiones y la cultura organizativa de la entidad
Un nivel instrumental que se traduce en la implantación de herramientas y mecanismos;
Un nivel organizativo y de gobernanza que dé cobertura y coherencia a todas las piezas del sistema, además de realizar un seguimiento, evaluación y mejora del mismo.